El programa de lectura ‘Libro al viento’ llegará a
todos estos espacios con libros de literatura universal, nacional y local. El
Idartes publicará 7 títulos al año, con un tiraje de 15 ejemplares cada uno.
Adicionalmente, se crearán líneas de estímulos para
fortalecer y articular el trabajo con las bibliotecas comunitarias y las
librerías, con el propósito de que tengan una presencia cada vez más fuerte en
la ciudad y se conviertan en espacios para la difusión cultural.
“Este es un plan en el que tiene que participar
toda sociedad, desde los expertos del sector editorial y la academia, hasta el
sector privado, la escuela y las familias, porque el objetivo es hacer que los
niños y jóvenes crezcan como lectores, y que no haya un bogotano más, desde el
más chiquito hasta el más viejo, que no tenga la capacidad de leer y de
escribir, pero que además tenga acceso en igualdad de condiciones al
conocimiento y a los libros”, asegura el alcalde Enrique Peñalosa.
La Red de Bibliotecas Públicas de Bogotá
(BibloRed), programa de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, que
tuvo su origen durante el primer mandato del alcalde Enrique Peñalosa con la
construcción de las tres mega bibliotecas Virgilio Barco, El Tintal y El Tunal
(hoy Gabriel García Márquez), será una de las grandes protagonistas del Plan.
Esta Red, que está cumpliendo 15 años, ya cuenta
con 19 centros de conocimiento en 14 localidades. “Nuestra meta es aumentar el
número de usuarios, que hoy alcanzan los 5 millones al año. Para lograrlo,
consolidaremos programas como la Biblioteca Digital de Bogotá, para que la
ciudadanía pueda acceder a colecciones bibliográficas, investigaciones,
herramientas y servicios digitales, a través de las tecnologías de la
información y las comunicaciones. Y pondremos en marcha nuevos programas como
Distrito Gráfico, que busca acercar a los jóvenes a estos espacios mediante el
cómic y la novela gráfica. Tendremos salas adecuadas para el dibujo, con
computadores, material audiovisual y conexión wi-fi, y promoveremos la
producción de contenidos transmedia”, asegura Ana Roda, directora de Lectura y
Bibliotecas de la Secretaría de Cultura.
Lo mismo hará la Secretaría de Educación en las
bibliotecas escolares. “Llegaremos a 172 bibliotecas escolares fortalecidas y
habilitaremos espacios de lectura en el resto de las instituciones educativas
para que cada escuela cuente con una colección semilla de “Leer es Volar”. Y
desarrollaremos una política de textos escolares que fomente el vínculo entre
las competencias de lectoescritura y el gusto por la lectura”, afirmó María
Victoria Angulo, secretaria de Educación.
Desde Educación trabajarán con rectores, docentes,
bibliotecarios escolares y padres de familia para que adquieran herramientas
que les permitan apoyar el fomento de la lectura y la escritura en niños y
jóvenes. “El objetivo es lograr que todos los niños de 8 años sepan leer y
escribir. Es decir que debemos trabajar para que 12.075 niños y niñas mejoren
sus capacidades lectoescritoras”, agregó Angulo.
Los colegios con más bajo logro en las 10
localidades, según las pruebas saber 3 de lenguaje, tienen más de mil niños
cada una en niveles insuficientes y mínimo: Ciudad Bolívar (3073), Usme (2560),
San Cristóbal (1807), Rafael Uribe (1980), Usaquén (1030), Kennedy (3873), Bosa
(3424), Tunjuelito (1320), Suba (2490) y Engativá (1907).
“Realizaremos un proceso de formación situada que
permita que toda la institución educativa incentive la lectura y la escritura
desde diferentes temas, formatos y dispositivos. Sin embargo, haremos foco en
los 9.396 docentes de 3ro y los 150 bibliotecarios escolares”, agregó la
secretaria de Educación.
El plan ‘Leer es volar’ llegará a la jornada
extendida y la jornada única escolar. “Creemos que el poner en la agenda educativa
el arte, la cultura y el deporte, de la mano del desarrollo de las competencias
básica y socioemocionales, hará de la lectura y escritura un elemento
transversal a los programas de jornada extendida”, concluyó María Victoria
Angulo.
La primera acción de este Plan de Lectura y
Escritura ‘Leer es volar’ es el apoyo dado por la Alcaldía de Bogotá a la 29ª
Feria Internacional del Libro, un evento cultural de la mayor importancia, que
transforma durante tres semanas la ciudad en un espacio para los libros, la
lectura y los lectores, y que este año tendrá resonancias en las 19 bibliotecas
de BibloRed.