martes, 24 de noviembre de 2015

Recibir para poder dar...


El recibir y el dar están unidos de una forma mágica y coherente. Esta dinámica permite establecer un equilibrio emocional en las diferentes relaciones afectivas que se desarrollan desde la infancia. No se puede dar lo que no se tiene, se da lo que se puede dar y entre más se recibe más se puede dar. No es simplemente un juego de palabras, en realidad corresponde a uno de los órdenes del amor. En la literatura infantil se identifica en diferentes personajes esta acción. Un claro ejemplo podría ser la obra de Oscar Wilde, El gigante egoísta, quién puede dar amor a los niños, solamente cuando lo descubre en su corazón.
En el Club de lectura se está desarrollando un proceso literario que permite fortalecer en los pequeños las acciones de recibir y dar las gracias, entender este valor y poder dar desde el corazón lo que han recibido.

El tiempo de Acción de gracias y la Navidad, enmarcan las historias que estamos leyendo. Nuestra invitación es propiciar espacios familiares para ejemplificar y vivir la importancia de ser agradecidos y ayudar a quien lo necesite. Los pequeños lo grabarán en sus corazones.