lunes, 29 de septiembre de 2008

EL LLANTO DE UN PEZ



Un día Santiago caminaba por el campo y de pronto escuchó que alguien lloraba, él con deseo de ayudar buscó el origen del sonido, se dio cuenta que el llanto venía de un río de aguas muy turbias. Con mucho cuidado se acercó a la orilla y se dio cuenta que el que lloraba era un PEZ.
Conmovido por lo que vio, el niño le preguntó que era lo que le pasaba y el pececillo le dijo:
-Por este sitio pasa mucha gente pero solo tú te has acercado a preguntar que me pasa y te lo voy a contar- El pececillo le dijo que se estaba quedando sin oxígeno y que si no lo ayudaban iba a morir.
Santiago le dijo que lo llevaría a casa y que así podría cuidarlo para que no le pasara nada. El pececillo respondió: - no me gusta estar encerrado, me gusta estar en este sitio viendo la naturaleza, los animales. Además tendrías que llevar a mis papás, a mis hermanos y hermanas y a todos mis amiguitos, porque no sólo soy yo el del problema y creo que no nos podrías tener en tu casa a todos.
-El niño le dijo ¿Que puedo hacer? no quiero verte triste- y el pez le respondió:
-Durante mucho tiempo los humanos han arrojado basuras y aguas contaminadas a los ríos, han talado árboles y todo esto hace que el oxígeno en los ríos y quebradas disminuya y por falta de este han muerto muchos peces. Si siguen contaminando nuestra casa, pronto me tocará el turno a mí, yo pido que ustedes los niños empiecen a cuidar los ríos, puesto que de ellos ustedes también toman el agua.
Santiago en ese momento entendió porqué en el colegio les dicen que la tierra está enferma. Le dijo al pececillo que estuviera tranquilo porque él estudiaba en un colegio donde se preocupan por el futuro de los niños y por eso les estaban enseñando ¡cómo curar la tierra! y que había muchos niños con ganas de mejorar el sitio donde vivimos y así mejorar la vida de los animales, tu vida y la de toda tu familia.
-Muchas gracias Santiago, le dijo el pececillo- ahora estaré más tranquilo porque sé que los niños con la ayuda de los grandes, lucharán para que nuestro planeta tierra vuelva a ser el sitio limpio y de aguas claras que alguna vez fue.
Santiago se despidió del pececillo y salió corriendo a casa a comenzar con la hermosa tarea de CURAR LA TIERRA.

Cuento realizado por el niño Santiago Cano de Transición 4 y su familia. ¡Felicitaciones!